1/14/2016

¿FORMAR O NO FORMAR?




Examen físico por aparatos

AP. Aparato respiratorio


Inspección: Frecuencia respiratoria. Movimientos respiratorios. Expansibilidad torácica. Ritmo respiratorio (describir tipo). Presencia de tiraje, abovedamientos y retracciones.
Palpación: Expansibilidad torácica y vibraciones vocales (conservadas, aumentadas, disminuidas, o abolidas). Percusión: Sonoridad pulmonar (normal, hipersonoridad, timpanismo, submatidez, matidez).
Auscultación: Murmullo vesicular (normal, disminuido, ausente), ruidos adventicios, o estertores, auscultación de la tos y auscultación de la voz (pectoriloquia, broncofonía).


Aparato cardiovascular


Inspección: Latido de la punta (presencia, o ausencia, localizaciones, modificaciones patológicas, como latido en escalera, en cúpula de Bard, etc.).
Palpación: Palpar región precordial desde la punta, hasta la base, en diferentes posiciones; palpación del choque de la punta, región subxifoidea y hueco supraclavicular. Es necesario precisar vibraciones valvulares palpables, frémito,  ritmo de galope diastólico, roce pericárdico y latidos arteriales, o venosos.
Percusión: Determinar área de submatidez cardiaca y sus alteraciones (disminuida agrandada).
Auscultación: Debe realizarse con el enfermo sentado, en decúbito supino y en decúbito lateral izquierdo, para determinar los ruidos cardiacos en los focos de auscultación: punta, aórtico, pulmonar, tricuspídeo y mesocardio. Identificar presencia de ritmo de galope, chasquido de apertura de la mitral, acentuación, o desdoblamiento de los ruidos, clicks, soplos y arrastres. En el caso de los soplos, debe precisarse: momento, localización, intensidad, tono, timbre, irradiación y modificación con diferentes maniobras.
  1. Examen del pulso radial: Frecuencia, amplitud, intensidad, y sincronismo.
  2. Medir la presión arterial en miembros superiores e inferiores, con el paciente acostado, sentado y de pie.
  3. Sistema arterial periférico: Determinar la presencia, o ausencia de pulsos periféricos, o disminución de la amplitud de los mismos (pulsos temporales superficiales, carotídeos, humerales, radiales, femorales, poplíteos, tibiales posteriores, pedios). Auscultación en busca de soplos arteriales en regiones ileofemorales, poplíteas, carotídeas, flancos.
  4. Sistema venoso periférico: Precisar la presencia de várices y microvárices. Utilizar pruebas para explorar el sistema venoso superficial (Rivlin, Adams, Trendelemburg) y el sistema venoso profundo (Perths, Oschener).

Aparato digestivo


Boca: Examen de los labios, encías (cambios hipertróficos, inflamación, hemorragia, presencia de pus, absceso, ribete obscuro, etc.). Dientes (presencia de caries, falta de piezas dentarias, manchas, diente de Hutchinson, supuraciones, absceso apical, etc.). Lengua (coloración, volumen, atrofia de la mucosa, ulceraciones, tumoraciones, leucoplasia, tipos de lengua patológica: escrotal, velluda, geográfica, etc.). Bóveda palatina (paladar hendido, ojival, etc.), cara interna de las mejillas (estomatitis, aftas, signo de Koplick, estado del orificio de salida del conducto de Stenon), piso bucal (frenillo, orificios de las glándulas sublinguales, venas raninas).
Orofaringe: Examinar velo del paladar, amígdalas y pared posterior de la faringe.
Maniobras y puntos dolorosos abdominales: Punto vesicular (maniobra de Murphy), punto apendicular, o de Mc Burney, dolor a la descompresión brusca (Blumberg), maniobra de Rovsing Meltzer, etc.
Hígado: Determinar el borde superior, por percusión y el borde inferior, por palpación, según las distintas maniobras (acecho, enganche, etc.). De encontrarse una hepatomegalia, describir: tamaño, consistencia, sensibilidad y si la superficie es lisa, o presenta nodulaciones.
Tacto rectal: El paciente puede estar en posición ginecológica, o genupectoral. Debe precisarse la existencia de paquetes hemorroidales, el tono del esfínter, tumores palpables y las características de la próstata (tamaño, consistencia, superficie y sensibilidad).

 

Aparato genitourinario


Riñones: Maniobras de palpación renal. Se recomienda, con el paciente acostado en decúbito supino, proyectar la región lumbar hacia delante con una mano, mientras que con la otra colocada en el abdomen, se trata de prensarlo contra la pared posterior.
Fosas lumbares: Detectar aumento de volumen, cambios inflamatorios, etc. Palpación y percusión para determinar si son dolorosas, o no.
Puntos pielorrenoureterales (PPRU): Si son dolorosos o no. Se dividen en:

  • PPRU anteriores: Superior: unión de una línea horizontal que pase por el ombligo, con una vertical, que pase por el borde externo del músculo recto anterior del abdomen; medio: unión de la misma vertical, con la línea hilíaca ; inferior: mediante el tacto rectal.
  • PPRU posteriores: Costovertebral: unión de la duodécima costilla con la columna vertebral; costomuscular: unión de la duodécima costilla con el borde externo de los músculos paravertebrales.
    Genitales externos: inspección y palpación a través del tacto rectal (ya descrito) y tacto vaginal para precisar caracteres de la vagina  (forma, posición y tamaño del útero) y las características del cuello uterino y de los fondos de saco.
     
    Sistema hemolinfopoyético

    Examen osteomedular: Palpar los diferentes huesos, en busca de tumoraciones, o dolor provocado. Percusión del esternón (signo de Dameshek: percusión dolorosa).
    Adenopatías: Palpación meticulosa de las regiones ganglionares  (retroauriculares, occipitales, submentonianas, submaxilares, cervicales, supraclaviculares, axilares, epitrocleares, inguinales). En caso de existir adenopatías, precisar: tamaño, consistencia, sensibilidad, adherencia a planos profundos, fistulización.
    Bazo:
    Inspección: Apreciar aumento de volumen del hipocondrio izquierdo (en grandes esplenomegalias).
    Palpación: El paciente en decúbito supino, el médico a la derecha del enfermo, la mano derecha se coloca sobre el flanco izquierdo, sin presionar demasiado (peligro de rotura esplénica). Se pide al paciente que respire profundamente: un bazo palpable tropieza con los dedos del explorador.
    Maniobra de Schuster: El paciente en decúbito lateral derecho, con la pierna derecha extendida, la pierna izquierda flexionada y el brazo izquierdo por encima de la cabeza. El examinador al lado izquierdo del paciente, palpará dicha zona, para determinar si existe o no, hipertrofia del órgano.
    Búsqueda de manifestaciones hemorrágicas: petequias, equimosis, várices  y hematomas.

    Examen neurológico

  • Conciencia: Desde el punto de vista neurológico, conciencia es sinónimo de vigilia, o sea, estar despierto y ser capaz de responder a estímulos de diversos orígenes. Las alteraciones fundamentales de la conciencia, son:
    Somnolencia
    Obnubilación
    Estupor
    Coma

  • Orientación: En este sentido el paciente puede estar orientado, o desorientado y en ambas situaciones,  la respuesta estará determinada por:
    Tiempo
    Espacio
    Persona: autopsíquica (sobre si mismo) y alopsíquica (
    sobre el mundo externo).

  • Memoria: Puede ser de dos tipos: anterógrada (corto plazo) y retrógrada (largo plazo). Los trastornos de la memoria, que más importancia tienen desde el punto de vista clínico, son las amnesias; éstas pueden ser:
    Totales o parciales
    De cálculo
    De fijación

  • Lenguaje y habla: Las alteraciones fundamentales de importancia neurológica son:
    Afasias y disfasias
    Disartria y anartria (
    alteración en la articulación de las palabras)
    Polilalia, bradilalia, ecolalia
    Tipos especiales de voz que se pueden ver en algunas afecciones: voz farfullante, voz escandida, de pájaro, voz cuchicheada.

  • Fascies: Las principales afecciones neurológicas con alteraciones de la fascie  son:
    Fascie parkinsoniana
    Fascie de fumador de pipa
    Fascie tetánica (risa sardónica)
    Fascie miasténica
    Fascie ansiosa
    Fascie depresiva
     

  • Actitud:
    Actitud de pie: Algunas posiciones típicas son:

    Enfermedad de Parkinson
    Hemiplejia capsular con espasticidad
    Ataxia avanzada (anteropulsión, retropulsión, lateropulsión).

    Actitud en el lecho: Posiciones típicas:

    Pacientes hemipléjicos
    Opistótonos
    Emprostótonos
    Posición en gatillo de escopeta

  • Marcha: Los aspectos fundamentales a precisar son:
    Capacidad de flexión y extensión de los segmentos de las extremidades inferiores.
    Movimientos coordinados entre las extremidades superiores y el tronco.
    Marcha en línea recta, o no; si la marcha es rápida, o lenta; si apoya primero el talón, o la punta del pie.
    Si el enfermo mira hacia delante, si mira al suelo, o fijamente hacia un punto y dónde pone los pies.
    Si aumenta la base de sustentación.

    Principales tipos de marcha patológica:

    Marcha hemipléjica (guadañante o del segador)
    Marcha parética (estepache)
    Marcha atáxica
    Marcha tabética (taloneante)
    Marcha cerebelosa (de ebrio)
    Marcha vestibular (zigzagueante)
    Marcha a pequeños pasos (bradibasia)
    Marcha digitígrada
    Marcha en tijeras
    Marcha de las miopatías primarias

  • Tono y trofismo muscular
    Mediante la inspección y la palpación, serán explorados los diferentes grupos musculares del cuerpo, precisando: aspecto, consistencia, relieve, contorno aumentado, o disminuido y actitud de las extremidades, siempre comparando regiones simétricas. También se explora la resistencia de los músculos, a la manipulación pasiva de los miembros, tronco y cabeza. El tono muscular puede presentarse: normal, aumentado (hipertonía), o disminuido (hipotonía). Al examinar el tono muscular, precisamos el trofismo, o estado de nutrición y desarrollo muscular; en ocasiones, es necesario recurrir a la medición, para identificar una atrofia muscular.

  • Motilidad
    Voluntaria:
    - Activa: Se le ordena al paciente que realice movimientos con sus diferentes segmentos corporales: cabeza, cuello, tronco y extremidades.
    Determinación de la fuerza muscular contra resistencia (exploración de la fuerza muscular segmentaria): Se le dan las manos al paciente y le ordenamos que apriete.
    Se le ordena al paciente que haga un movimiento cualquiera con un miembro, mientras se opone resistencia a dicho movimiento, ej.: elevación de los dedos de las manos, elevación de la muñeca, flexión  y extensión del brazo, antebrazo, muslo y pie.
    Determinación de la fuerza muscular voluntaria:
    Maniobra de Barré (para los miembros inferiores): Con el enfermo en decúbito prono y ambas piernas formando un ángulo de 45 grados con el muslo, se le ordena que las mantenga en esa posición durante un rato; puede provocarse sacudidas, mediante las cuales el paciente trata de recuperar la posición inicial perdida. Si uno de los miembros está parético, caerá antes que el otro.
    Maniobra de Mingazzini (para los miembros superiores): Se colocan ambos miembros superiores extendidos al frente, con las palmas de las manos hacia arriba. El miembro parético caerá más rápidamente.
    - Pasiva. Exploración de movimientos pasivos hechos por el explorador, fundamentalmente, flexión y extensión de los miembros superiores e inferiores.
    Involuntaria
    Reconocimiento de la presencia de movimientos involuntarios, tales como: tics, temblores, corea, atetosis, fasciculacioes, mioclonías, convulsiones, etc.

  • Sensibilidad
    Sensibilidad superficial: Al explorar sus distintas modalidades, es requisito indispensable que el paciente mantenga los ojos cerrados durante el examen.
    Táctil:
    Protopática: Se explora con un algodón, pincel, etc., tocando suavemente diferentes puntos de la piel.
    Epicrítica: Se explora mediante un compás; sirve para medir la capacidad discriminatoria entre dos puntos.
    Térmica (frío o calor): Se toman dos tubos de ensayo, uno con agua fría y otro con agua tibia y se exploran las diferentes regiones, siempre simétricamente.
    Dolor: Se explora mediante una aguja, alfiler, punzón, etc, introduciéndola suavemente en la piel.
    Sensibilidad profunda: Comprende diferentes modalidades.
    Palestesia (sensibilidad vibratoria): Se explora mediante el diapazón, haciéndole vibrar con un golpe y colocándolo sobre eminencias óseas y articulares. El paciente percibe la vibración sobre el hueso.
    Batiestesia (sentido de posición): Sin que el paciente mire, se le mueve pasivamente, en distintas direcciones algún dedo de la mano, o de los pies y se le detiene en una posición cualquiera, preguntándole en qué posición se encuentra.
    Barestesia (sentido de presión): Se hacen presiones con el dedo pulgar, o con la mano del explorador en diferentes regiones. El paciente experimenta esa presión; hay que considerar que la presión muy profunda puede resultar dolorosa.
    Barognosia (sentido de peso): Se colocan objetos de distinto peso, en cada una de las manos del paciente, para que identifique cuál pesa más. El paciente tendrá los ojos cerrados.
    Estereonosia (reconocimiento de objetos): Se coloca un objeto cualquiera, en la palma de las manos del enfermo (con los ojos  cerrados), el cual deberá ser fácil de identificar (un reloj, un bolígrafo, una moneda, etc.) y se le pide que lo reconozca y que señale sus características: forma, tamaño, consistencia.
    Sensibilidad visceral: Se presionan suavemente órganos asequibles y que resulten dolorosos: mamas, tráquea, testículos.

  • Taxia (Coordinación)
    Coordinación estática
    Signo de Romberg simple: Con el enfermo de pie, se le ordena que permanezca en actitud firme, con los pies juntos y los ojos cerrados. Normalmente, el paciente permanece de pie, sin presentar oscilación de su cuerpo (el signo es negativo). Si el enfermo, en lugar de conservar la posición de equilibrio, oscila y tiende a caer, el signo de Romberg es positivo. En ambos casos, el paciente debe tener los brazos extendidos lateralmente. Según la dirección de la oscilación, se hablará de anteropulsión, retropulsión, o lateropulsión.
    Signo de Romberg sensibilizado: Se ordena al paciente que se pare con un pie delante del otro, o levantando una pierna y que toque con el talón la rodilla de la otra pierna. Luego se le ordena cerrar los ojos; si presenta oscilación y cae, el signo es positivo.
    Coordinación dinámica:
    Para los miembros superiores: maniobra índice – índice; maniobra índice– nariz; prueba dedo – dedo.
    Para los miembros inferiores: prueba talón – rodilla; prueba talón – punta del pie.
    Otras pruebas para explorar la taxia, son la maniobra de las marionetas y la prueba de la aprehensión de objetos.

  • Praxia
    Movimientos intransitivos: Se le ordena al paciente: escribir sin lápiz, sacar la lengua, saludo militar.
    Movimientos transitivos: Abotonar y desabotonar la camisa, peinarse, encender un cigarro.
    Movimientos imitativos: El explorador realiza un gesto y el paciente tiene que imitarlo.

  • Reflectividad
    Reflejos cutáneomucosos, o superficiales
    Reflejo corneal
    Reflejo faríngeo, o náuseoso
    Reflejos cutáneoabdominales: superior, medio e inferior.
    Reflejo cremasteriano.
    Reflejo cutáneoplantar: Se excita con un lápiz, una llave, o cualquier objeto romo en la planta del pie, en la región externa, media, o interna; la respuesta normal será la flexión plantar de todos los dedos.
    Signo de Babinsky: Aparece cuando, al explorar el reflejo cutáneoplantar, la respuesta obtenida es la flexión de los cuatro dedos y la extensión del dedo grueso, o todos los dedos se abren en abanico.
    Reflejo de Pousset: Aparece cuando, al realizar la maniobra de búsqueda del signo de Babinsky, se obtiene la abducción del quinto dedo.
    Sucedáneos del signo de Babinsky:
    Maniobra de Oppenheim: Se presiona con el pulgar, de arriba hacia abajo, la cara anterointerna de la tibia, rodando por su borde.
    Maniobra de Schaeffer: Se realiza comprimiendo el tendón de Aquiles.
    Maniobra de Gordon: Se realiza comprimiendo las masas musculares de la pantorrilla.
    Reflejos osteotendinosos, o profundos:
    Reflejo orbicular de los párpados (supraorbitario, o nasopalpebral)
    Reflejo mentoniano, o masetero
    Reflejo bicipital
    Reflejo tricipital
    Reflejo estilo-radial
    Reflejo cúbito- pronador
    Reflejo de los flexores de los dedos de las manos:
    Técnica de Traemner
    Técnica de Hoffman
    Reflejo mediopubiano
    Reflejo rotuliano, o patelar: Con el enfermo acostado, se levantan ligeramente los miembros inferiores con una mano colocada debajo del hueco poplíteo, se consigue una ligera flexión de la pierna sobre el muslo, de tal forma que la rodilla quede en alto y se percute sobre el tendón rotuliano; con el enfermo sentado, ambas piernas deben caer en forma de péndulo, sin tocar el suelo y  se percute sobre el tendón rotuliano.
    Reflejo aquiliano: Con el enfermo sentado, ambos miembros inferiores deben estar en forma de péndulo en el borde de la cama, o silla, se toma el pie con una mano y se flexiona sobre la pierna, se percute sobre el tendón de Aquiles y la respuesta es la flexión plantar del pie; con el enfermo de rodillas sobre una silla, o la cama, los pies deben estar fuera del borde (de la silla, o la cama) y se procede igual que en el caso anterior; con el enfermo acostado, se coloca el pie del miembro inferior a explorar, en semiflexión y se procede a la abducción sobre el miembro opuesto, de forma tal que descanse sobre el maleolo externo, con una mano se toma la planta del pie, se lleva en ligera flexión y se percute el tendón de Aquiles.
    Clonus: se debe explorar cuando los reflejos profundos están exaltados.
    Clonus del pie: Se indica al paciente que flexione la pierna sobre el muslo y se le hace descansar sobre el antebrazo, se toma el pie por la cara plantar y manteniéndolo en esa posición, se le realiza una flexión forzada pasiva del mismo, con lo que el pie inicia una serie de sacudidas rítmicas.
    Clonus de la rótula: Con el miembro inferior en extensión, se toma la rótula entre los dedos índice y pulgar de una mano y se le imprime un movimiento rápido hacia abajo, manteniéndola en esa posición, entonces se produce el clonus.

  • Signos meníngeos: rigidez de nuca.
    Signos de Kernig:
    Superior: Con el paciente acostado, el explorador coloca la mano debajo de la nuca y levanta el tronco hasta sentarlo. El signo es positivo si se flexionan los muslos sobre la pelvis y las piernas sobre los muslos.
    Inferior: Con el paciente en la misma posición, se levanta un miembro inferior (pierna y muslo) manteniéndolo extendido. El signo es positivo si a cierta altura se produce la flexión de la rodilla.
    Signo de Brudzinski: Con el paciente acostado en decúbito supino, colocamos una mano sobre el tórax para impedir que se levante y con la otra flexionamos la nuca. La respuesta es positiva, si los dos miembros inferiores se flexionan al nivel de las rodillas y las caderas.
    Contralateral: Si se flexiona fuertemente un muslo sobre la pelvis, el miembro opuesto reproduce el movimiento.
    Pares craneales:
I par (nervio olfatorio)
Cada lado de las fosas nasales se explora por separado. Se le dan a oler al paciente (quien tendrá los ojos cerrados) sustancias volátiles y de fácil identificación (café, alcohol, mentol, etc.).

II par (nervio óptico)
Agudeza visual: Se coloca al enfermo a una distancia de 20 pies del observador, se le muestran sucesivamente los dedos de la mano y se le pide que los cuente. El enfermo mantendrá tapado el ojo contrario al que se explora, con la mano del mismo lado. Para una exploración más precisa se utilizará la escala de Snellen.
Perimetría y campimetría: Para la exploración del campo visual, de frente al enfermo, tapamos el ojo que no vamos a explorar con una mano; lo mismo debe hacer el paciente. Luego se sitúa el dedo índice de la otra mano, o un objeto cualquiera (puede ser un lápiz), en el campo visual desde la periferia hacia el centro, siempre a la misma distancia de uno y otro, de manera que cuando el explorador comience a verle, el paciente también lo verá. La mirada debe mantenerse fija, y ambos, paciente y explorador deben mirarse de frente y fijamente. Finalmente, se mueve el objeto en diferentes radios, para comprobar en qué cuadrante se encuentra el defecto del campo visual.
Visión de colores: Identificación de distintos colores: rojo, verde, amarillo, etc.
Fondo de ojo.
 

Pares III, IV y VI (Examen de la motilidad ocular)
Primeramente se observa si ambos globos oculares son simétricos, luego se fija la cabeza con una mano y se le indica al paciente que siga con la vista un dedo del explorador, que se mueve frente a sus ojos en dirección horizontal, de derecha a izquierda y viceversa hasta las porciones externas, luego en dirección vertical y por último, en forma circular para apreciar los movimientos oculares.
 
III par (nervio óculomotor)
Comprobar si la apertura palpebral es normal. En caso de parálisis hay ptosis palpebral.
Examen de la pupila: forma, tamaño (diámetro normal: 2-4 mm).
Reflejo fotomotor: Se hace incidir un haz de luz directamente en la pupila y esta normalmente se contrae.
Reflejo de acomodación: Se indica al paciente, mirar hacia un lugar lejano, después al dedo del explorador colocado cerca del ojo; la pupila normalmente se contrae para acomodarse a la mirada cercana.
Reflejo consensual: Cuando exploramos el reflejo fotomotor, observamos que normalmente la pupila del otro ojo también se contrae.
En las lesiones del III par, encontramos incapacidad para mover el globo ocular hacia arriba, abajo y adentro, por parálisis de los músculos recto superior, inferior, interno y oblicuo menor. El ojo presentará un estrabismo por tironamiento hacia fuera, al predominar el recto externo.
 
IV par (nervio patético, o troclear)
Al paralizarse este par craneal, el ojo se desvía hacia arriba y afuera (mirada patética) y no se mueve hacia abajo y adentro.

V par (nervio trigémino)
Porción sensitiva: Exploración de las distintas modalidades sensitivas de la cara (táctil, dolorosa y térmica).
Puntos dolorosos de Valleux: supraorbitario, infraorbitario, mentoniano.
Porción motora: Se le indica al paciente que apriete fuertemente los dientes, para proceder a palpar los músculos maseteros; esto nos permite percibir el endurecimiento de las masas musculares. También se le indica que abra la boca y con una mano se hace resistencia a este movimiento, con lo que se comprueba la contracción y la fuerza de los maseteros.
Reflejo mentoniano, o maseteriano (ver reflectividad profunda)
Reflejo corneal (ver reflectividad superficial).

VI par (nervio abductor)
Si se afecta este par, el paciente presenta un estrabismo interno por tironamiento y predominio del recto interno.
En muchas de las parálisis oculares el paciente presenta diplopia.
 
VII par (nervio facial)
Porción sensitiva: Consiste en el examen de la sensibilidad gustativa de los dos tercios anteriores de la lengua; se examina colocando sal, o azúcar en esa zona y se le muestra al paciente un letrero con estos nombres para que identifique el sabor.
Porción motora: Inspección de la cara del paciente, para detectar asimetría facial, hendidura palpebral, si las lágrimas se derraman solas y si hay desviación  de la comisura labial.
Facial superior: Se le ordena el fruncimiento de la frente hacia arriba, así como cerrar fuertemente los ojos.
Signo de Bell: Existe cuando el paciente trata de cerrar los ojos y no lo logra y el globo ocular se dirige hacia arriba.
Facial inferior: Se le indica al paciente que muestre los dientes, silbar, soplar, sonreír.
Maniobra de Pierre-Marie-Foix: Se hace presión con ambos dedos índices, sobre la parte posterior del ángulo de la mandíbula, para poner en evidencia una parálisis facial.
 
VIII par (nervio estetoacústico, o vestibulococlear)
Rama vestibular: Primeramente se indaga si el paciente presenta pérdida de equilibrio, vértigos, o vacilación en la marcha.
Presencia de nistagmo: horizontal, vertical, o rotatorio.
Prueba de la desviación del dedo índice de Barany
Presencia de marcha zigzagueante
Estrella de Babinski
Examen de la función laberíntica mediante pruebas especiales (rotatoria, calórica).
Rama coclear: Examen de la agudeza auditiva.
Prueba de Weber
Prueba de Rinne
Pruebas audiométricas
 
IX par (nervio glosofaríngeo)
Rama sensitiva:
Exploración de la sensibilidad gustativa del tercio posterior de la lengua
Exploración del reflejo faríngeo
Exploración del reflejo del seno carotídeo
Rama motora:
Fenómeno de Vernet: Se le ordena al paciente decir “A” con la boca abierta; normalmente se produce la contracción de la pared posterior de la faringe.
Movimiento de la deglución
 
X par (nervio vago, o neumogástrico)
Examen del movimiento del velo del paladar, al pronunciar la letra “A” (normalmente hacia arriba).
Examen del movimiento de las cuerdas vocales, mediante un espejo laríngeo.
Exploración del reflejo óculo cardíaco
Examen de los movimientos deglutorios
 
XI par (nervio espinal)
Examen de los movimientos del cuello, al hacer girar la cabeza del paciente.
Palpación del tono de los músculos esternocleidomastoideos y trapecio.
Comprobación de la fuerza muscular:  Se indica al paciente que eleve ambos hombros y se opone resistencia al movimiento, presionando sus hombros con ambas manos.
Oposición a los movimientos de la cabeza: flexión, extensión y rotación.
 
XII par (nervio hipogloso)
Se le ordena al paciente que saque la lengua, para observar si hay asimetría, desviación de la punta, fasciculaciones.
Se le ordena que mueva la lengua en todas direcciones.
Se le ordena que presione con la lengua, sobre la región posterior de las mejillas y por fuera nos oponemos a este movimiento.



Valoración pupilar...




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El tamaño pupilar se valora a través de la inspección de la pupila. Si el paciente está inconsciente, el explorador le levantará ambos párpados. Se han de valorar las pupilas de ambos ojos, observando la forma, la posición y el tamaño.


Resultados de la exploración

Midriasis: 

 Dilatación/aumento del tamaño pupilar (por dominio de la inervación simpática). Puede deberse a una lesión grave del mesencéfalo (Si va acompañada de arrectividad), ingestión de fármacos o drogas con actividad anticolinérgica, utilización de colirios diagnósticos o terapéuticos, así como los traumatismos oculares directos.

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Miosis:

Disminución del tamaño pupilar (por dominio de la inervación parasimpática). Frente a una exposición a la luz, el tamaño pupilar disminuye rápidamente en condiciones normales. La miosis bilateral (de 1 a 2,5 mm) se observa con mayor frecuencia en los cuadros de encefalopatía metabólica y en las lesiones hemisféricas bilaterales y profundas como la hemorragia talámica o la hidrocefalia, afectación del tronco cerebral.

Las pupilas puntiformes bilaterales (diámetro menor de 1 mm) y reactivas indican una sobredosis por narcóticos, aunque puede observarse también en lesiones extensas de la protuberancia, producidas por hemorragias.


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Anisocoria:

Diferencia de tamaño entre ambas pupilas. Por lo general, el aumento unilateral de una pupila indica la presencia de una masa ipsilateral (del mismo lado) (lesión mesencefálica intrínseca).

En las hemorragias cerebrales extensas que afecten al tálamo puede observarse miosis unilateral (en el ojo del mismo lado afectado).

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Reactividad pupilar


Reflejo fotomotor
Al iluminar un ojo con una fuente de luz, en condiciones normales, se observará la contracción de la pupila del mismo.

Reflejo consensuado
Se valora al mismo tiempo que el reflejo fotomotor, observando, en condiciones normales, la contracción de la pupila del ojo que no está iluminado.

Reflejo de conjugación de la mirada
Valora la sincronía de ambos ojos durante el seguimiento de una luz en movimiento (hacia arriba, abajo, derecha e izquierda).

Reflejo de la acomodación
Se basa en la variación del tamaño pupilar ante la visión de un objeto cercano y, seguidamente, otro lejano