8/26/2008

Los dummies no entienden de régimen


Los dummies, muñecos que se utilizan para las pruebas de seguridad en automóviles, son réplicas a escala real de las personas, y como tal, deben responder fielmente al comportamiento del cuerpo humano en caso de colisión. De esta forma, el más mínimo detalle es esencial en su diseño, como son el peso, las proporciones, las articulaciones, etc. Desde los primeros dummies, las evoluciones introducidas en los mismos han ido sucediéndose con el paso de los años, y parece que ahora ha llegado la hora de engordarlos un poco.
El dummy estándar de hoy en día (el Hybrid III percentil 50) corresponde a un hombre que mide 168 cm y pesa 77 kg. Pero al parecer, los nuevos estilos de vida de nuestra sociedad y los crecientes índices de obesidad, están haciendo replantear el uso de otros dummies algo más pesados en los ensayos de choque, de manera que se cubra esta creciente franja de la población. El modelo que se pretende usar a partir de ahora representará una persona de unos 100 kg de peso (de hecho, el Hybrid III percentil 95 mide 188 cm y pesa 100 kg).
Adrian Hobbs, secretario general de crash test de Euro NCAP, ha reconocido que emplear modelos más grandes reportaría una valiosa información en lo que a seguridad se refiere: “Actualmente, en nuestros test se usan dos dummies masculinos de tamaño medio en los asientos delanteros y 2 dummies de niño, uno de 1 año y medio y uno de tres, en los traseros. Seguiremos empleando los mismos, pero estamos considerando hacer otro crash test ligeramente diferente, para comprobar cómo se comportan los coches cuando chocan entre ellos – y añadiendo diferentes medidas de dummies”.
Hobbs apuntaba directamente al ya comentado Hybrid III percentil 95: “Uno de estos podría ser el dummy masculino percentil 95”. Pero no sólo aquí acaban los cambios en el empleo de dummies. También hay planes para usar con asiduidad dummies femeninos que representen el 5% de las dimensiones inferiores de la escala ( unos 50 kg de peso). Según Hobbs, este último caso responde a que “no sólo las mujeres son más pequeñas, sino que se sientan más cerca del volante y tienen un peso menor, por lo que no se abrochan el cinturón muy a menudo”.
Finalmente, Hobbs sentencia que “lo mejor es hacer test con las tres medidas, la grande, la mediana y la pequeña”. Así que los crash test de toda la vida seguirán siendo como siempre, pero se ampliará la gama de pruebas a las nuevas medidas que requiere la sociedad. Esto sólo puede repercutir en una mayor seguridad en el diseño de los vehículos.

No hay comentarios: